Tal vez para responder correctamente a esta pregunta deberíamos formularla en sentido contrario ¿cuando no es necesaria la inteligencia competitiva en empresas?
De esta forma acabaríamos antes.
Si la inteligencia competitiva esta directamente relacionada con la explotación de la información del entorno en las empresas, entonces parece claro que esta siempre es necesaria. Sin embargo la realidad es que a pesar de que la mayoría de las organizaciones consideran a la información como un activo de gran valor para la actividad, muy pocas son capaces de poner esta información a trabajar.
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La inteligencia competitiva en empresas es una maldición
Nada en el mundo de los negocios es una bendición o una maldición al mismo tiempo, excepto la información
La mayoría de los directivos sabemos que las informaciones que nos llegan a diario en nuestro inbox están llenas de indicadores y datos esenciales para el negocio, en el mejor de los casos.
El único problema esta en que nuestro buzón de correo esta a rebosar y no tenemos tiempo más que para atender lo que creemos es inmediato. De esta forma sería incluso comprensible que la mayoría de los directivos ignorasen el contenido de estos e-mails para seguir tomando decisiones como siempre.
Es decir por pura intuición y al estilo FIFO.
Lo que ya es más difícil de explicar es que mientras la mayoría de las empresas afirman entender el gran valor que supone la información para la operación de sus actividades, sus directivos sin embargo se ven incapaces de utilizarla para el provecho de la propia organización.
¿A que se debe esta paradoja?
Personalmente creo que nadie en su sano juicio renunciaría a la mejor fuente de generar ventajas competitivas para su empresa.
Creo que la situación actual de la información en las empresas, tanto en grandes como pequeñas, se debe a que no sabemos como transformar esta en una ventaja para desarrollar más y mejores productos, de forma más rápida y llegar a más y mejores clientes.
¿Cual es el problema con la información en las empresas?
La realidad es que no utilizamos la información porque no sabemos como sacar rendimiento de ella
Básicamente podría decirse que el problema de la información en las empresas es que no sabemos procesarla. Precisamente esta es la función de la inteligencia competitiva en empresas: procesar la información para hacerla accionable.
De hecho según un estudio de PwC de este año, solamente el 35% de las empresas del reino unido son capaces de obtener valor de la información de la que disponen, mientras el 80% afirma que la información es una activo indispensable en su compañía. Los mismos resultados se desprenden de sus homologas en España, Francia, Alemania, USA y Canada.
De esta forma empresas de cualquier tamaño, país y sector no parecen estar triunfando demasiado a la hora de extraer valor de sus datos.
¿Entonces que esta pasando? ¿Esta la inteligencia competitiva en empresas condenada al fracaso?
Big data ese gran error en las empresas
Mientras que la inteligencia competitiva en empresas esta demostrándose como una bisagra clave entre los datos e información para convertir estos, en activos de la propia organización, la aparición del big data ha desviado el foco del debate hacia los grandes volúmenes de datos que ahora mismo la tecnología nos puede conseguir.
Así pues, nos estamos distrayendo de lo realmente importante, que es sacar conclusiones de los datos para tomar mejores decisiones en todos los departamentos de la empresa.
Gran Error. ¿Cómo esperas solucionar tu problema con la información, si no estas acostumbrado a recopilar, analizar y utilizar los datos en tu organización?
Al final no podemos pretender pasar a un estado avanzado de explotación de la información y los datos, sin previamente haber dominado las bases del tratamiento e interpretación de los datos.
La información por si sola no vale nada. Es necesaria ponerla en contexto y tratarla para visualizara. Es aquí donde la mayoría de las empresas fallan.
La inteligencia competitiva en empresas permite capturar los datos básicos y el small data para después extraer su valor.
Basic data y Small data las bases de la inteligencia competitiva en empresas
Para ilustrar esto con un ejemplo sencillo, casi siempre les digo a mis clientes que me respondan a esta preguntas:
- ¿Quienes son tus competidores?
- ¿Quien vigilia la actividad de tu competencia dentro de tu organización?
- ¿Cuantas referencias de productos comercializan?
- ¿Cuantas patentes tienen registradas? ¿Cuantas patentes han solicitado este año? ¿en que campos?
- ¿Cuantos nuevos productos ofrecen? ¿cuantos productos han presentado este año?
- ¿Cual es la evolución de sus estados financieros en los últimos 5 años? ¿y los del sector?
- ¿Cuantas veces han salido mencionados en la prensa? Y ¿qué se dice de ellos en las redes sociales?
- ¿Cuales son sus precios? ¿sabes como están evolucionando sus precios?
- ¿Tienen una pagina web? ¿Cuantas veces publican en su pagina web? ¿Y en sus redes sociales?
- ¿Cuales son sus indicadores SEO Palabras clave y SEM?
La mayoría no puede o no sabe como responder. ¿Por que? porque no controlan el basic data ni el small data. ¿Te imaginas lo que puede ocurrir si intentan explotar el big data? Seria un desastre.
La vigilancia de competidores es algo relativamente sencillo. Imagínate cuando hablamos de cosas mucho más complejas que requieren complicados procesos informáticos para gestionar millones de datos en los que nos perdemos. De esta manera es más fácil centrarse en los basic data del entorno competitivo y después utilizar las herramientas para interpretar esa información.
Esta es la labor de la inteligencia competitiva en empresas.
Si realmente creemos que la información es tan importante para la actividad de la empresa empecemos por lo básico y olvidemos del resto.
Domina primero lo básico y planteate después ir escalando en dificultad.